Como todo vampiro sabe, las primeras noches de tu existencia son bastante tortuosas, algunos afirmaran que el compendio de las millones de noches que seguirán el curso de su existencia son tan o mas tortuosas que el principio, pero de lo que si se jactan muchos de estos, es con la facilidad que pueden perder su tan poca y menospreciada humanidad.
En las primeras noches los chiquillos deben asumir la idea de que su vida se sesgo por completo y que la no vida que tienen por delante es una existencia llena de obligaciones y de una creciente y marcada puja de emociones conflictivas.
Cada chiquillo ama y odia a su sire y aunque tengan profunda reverencia para con su creador, muchos de ellos suelen revelarse.
Los Chiquillos son presentados ante la entidad superior a su sire quien decide si esta listo o no para ser parte de la sociedad vampirica, esto a su vez es tan solo una mera ilusión ya que existen muchos casos de abandono y de simple desprendimiento de la sociedad por parte de los chiquillos.
De esta manera los recién nacidos, se ensamblan en la sociedad vampirica. Luego de los pasos en las primeras noches, las cuales pueden durar años, cada vampiro es ascendido a neonato y es reconocido como parte de la sociedad vampirica, a su vez buscan algo que los motive, muchos buscan la simple diversión, la desfachatez de la perversidad o tan simplemente el pasar el rato.
Vampiros de todos los clanes se unen bajo la luz de las estrellas en diferentes búsquedas, en algunos casos sus búsquedas encuentran caminos encontrados con otros integrantes y esto da el comienzo a pequeñas pandillas.
La tranquilidad era su estigma, cansado de la falta de animosidad, Clarkus, se ve tentado por un Nosferatu, quien buscaba al sire de Clarkus para cierta propuesta, este toma la idea de la búsqueda, en el nombre del saber y el conocimiento.
Amarilis llegaba de su lejana tierra en búsqueda de varios Tremeré que estaban alterando el orden de
Farah despierta luego de una pesadilla en los sótanos del hospital en donde solía trabajar como enfermera, sabiendo que algo no esta donde debería, llama a su criado y le da instrucciones, se dedica a deambular por las zonas de los enfermos terminales que pasan sus últimos días completamente aturdidos por la cantidad de cócteles de drogas, luego de su alimentación, mas colocada en sus ideas decide ir a visitar a su sire que hace tiempo que no ve y comentarle lo que estuvo viendo en sueños. Pero antes deberá conseguir algo de amplificadores de la emoción para sus niños, un paseo por los dealers de turno deberá sustentar la necesidad.
Víctor se despierta con un sonido extraño llenándole los sentidos, la identifica como música "barata" música de niño rico le llama el, sabe que tiene que ir a ver a el gitano, pero aun así, le interesa quien esta molestando a sus oídos en una noche que debería ser tranquila, sobre todo en sus dominios. Los niños algo tomados, no tienen idea de que van a ser la cena de un molesto y violento brujah . La contienda es rápida pero mortal, la brutalidad de Víctor es visible, el auto pierde varias parte bajo el fulgor de sus puños, los jóvenes asustados pierden varios litros de su sangre y recordaran esa noche como si fuera una pesadilla muy particular, quizás le echen la culpa a alguna droga que nunca tomaron.
Uriel es visitado por su sire, quien a su vez encuentra muy extraño a su propio creador, le da instrucciones especificas de impedir una reunión en cierto lugar bailable, como es costumbre para el, atiende la llamada de su sire, no sin antes demostrar cierto recelo.
La noche en su interminable revuelo marca los caminos de incontables desconocidos y así los lleva a compartir el mismo sitio, aunque con diferentes intenciones.
Farah, se mueve por los callejones oscuros como si fueran las habitaciones de su casa, uno a uno encuentra a los dealers y uno a uno le comentan que no hay nada que vender esa noche, algo raro pasa en la ciudad y si alguien sabe el que y el como ese debe ser el gitano, luego de ciertas indicaciones, logra encontrar el camino para llegar hasta el lugar.
Víctor, luego de la cena y el entretenimiento, encamina hacia donde sus obligaciones lo requieren, necesita respuestas y solo hay un lugar en donde un vampiro como el puede conseguir algo como eso, el gitano. La moto de Víctor marca el compás nocturno y lo transporta hacia el bar., el personal de seguridad ya lo tiene bien reconocido, en varias oportunidades escucharon hablar de el, cuando su moto estaciones, saben que es posible que los problemas no estarán muy lejos esta noche.
Dentro el ambiente es viciado, es un bar. de mala muerte, un asilo para muchos cainitas que quieren hacer tratos o simplemente cenar sin mayores problemas. El gitano atiende toda clase de negocios, armas, drogas, compra y venta de objetos valiosos y en algunos casos, recuperación de dichos objetos.
Mientras Víctor espera ser atendido, divisa a una mujer muy particular, no esta muy descolocada del lugar, pero aun así, le llama la atención y no duda en escuchar los pedidos que hace la mujer al hombre que atiende la barra, el cual es bien conocido de Víctor.
Farah por su parte llega al lugar y luego de convencer al joven de seguridad, intenta lo mismo con el que atiende la barra, trata de persuadirlo de que la deje pasar a ver al gitano, las desvariaciones en la conversación le dan la pauta al hombre que limpia los vasos que no es buena idea dejarla pasar. Ofendida por no poder conseguir su cometido, Farah se da cuenta de que alguien la esta observando, curiosa e intrépida inicia conversación.
Uriel se dirige al lugar en el cual su sire marco el objetivo de su pedido, el lugar esta lleno de humanos y cainitas, es un antro llamado "El Réquiem" se encuentra en una avenida muy transitada y por lo que denota, la seguridad dentro del lugar es fuerte. La poca información que su sire le da es simplemente que alguien llamada Mab va a tener una reunión y el debe impedir que dicha situación suceda, armado con su confianza deja a sus guardianes fuera del lugar.
Amarilis decide ir hacia donde sus informantes afirman que puede averiguar más de sus sospechosos, alguien con quien traficar información le dicen, alguien llamada Mab. Su guardián maneja el auto, armado como de costumbre Racin ve las misiones de su ama como parte de su entrenamiento.
Clarkus se conduce en un taxi hasta la dirección que el Nosferatu le dio, Reina Mab dijo que lo esperaría y quizás pueda averiguar que clase de tratos tenia su sire con esa tal Mab, quizás ella tenia mas información del paradero del mismo.
Por su Parte Víctor y Farah conversan, si es que algo así pueda salir de un Brujah y una Malkavian, las ocurrencias de Farah sacan del buen juicio que Víctor tiene, aun así esto le divierte mucho. Víctor hace pasar a Farah con el para ver al gitano, esta le pidió mercancía que el esta dispuesto a intercambiar por un favor, el mismo que pide a Víctor por devolverle las armas que le fueron robadas, Víctor y Farah acceden, el gitano le da las armas a Víctor y promete a Farah lo que ella pide, luego de que cumpla con lo que pidió, deben llevar una caja a un señora llamada Mab, al parecer el gitano no quiere vérselas con esta mujer, les da las indicaciones de como llegar y les pide que se retiren.
Mientras tanto Amarilis llega al lugar, un boliche llamado "El Réquiem", un joven patova cuida la entrada del lugar, Amarilis con talante señorial le ordena que la deje pasar a lo cual el joven musculoso no hace caso, es mas la trata despectivamente, cuando ella nombra a Mab le presta un poco mas de atención, pero como Amarilis prosigue con su actitud le niega el paso, esta intenta usar su habilidad en el dominio de la vitae, pero se da cuenta que no hay vitae que manipular, molesta por tanta dificultad, le ordena a Racin que actué, este intenta atacar al patova, pero se sorprende al ver cuan buenos reflejos tiene y cuan rápido termina estampándolo contra un árbol, quebrándole algunos huesos y dejándole varias heridas, ambos proceden a retirarse, Amarilis hace que Racin maneje y que la lleve devuelta a su departamento para que llame a un medico particular para curar las heridas.
El taxi llega a su destino, Clarkus paga al chofer y se baja, espera hasta que se retire, la calle esta solitaria en estos momentos, divisa al patova en la puerta del lugar, entiende que es el lugar, intenta entrar como cualquier otro, pero el patova lo detiene, le explica que no puede pasar y que es mejor que se retire, Clarkus sonríe se aleja unos pasos y lo llama simio descerebrado, sonriendo le dice que los simios tiene que están en sus jaulas y conjura una jaula, luego procede a mover la jaula y pasa sin demasiados problemas. Dentro del lugar la música esta mas que fuerte, se puede divisar parte de las situaciones que se generan ya que las luces intermitentes dan una visión de cuadro por cuadro, personas bailando, cainitas alimentándose y tras la bruma de una niebla artificial, divisa la barra y en ella un personaje completamente desencajado, también puede ver que cerca de el se encuentran mas personas de seguridad a los lados de una gran cortina roja, se dirige a la barra, el personaje desencajado le llama la atención. Uriel espera que algo suceda, la música es alta y las personas le producen asco, aun así, parece que las piezas se van armando de a poco, entre la bruma ve a un hombre sospechoso que observa el lugar como buscando algo, pero sobre todo lo que le llama la atención que lo observa a el.
Víctor se ofrece a llevar a Farah en su moto hacia el lugar convenido para entregar el paquete a una tal Mab, cuando llegan, a Víctor le llama la atención que no hay nadie de seguridad afuera, entran y después de pasar por varias cortinas, están dentro del lugar, rebosante de cainitas y humanos, Víctor le comenta que seria prudente preguntar a los chicos de seguridad, el conoce a varios de ellos, ya que solía trabajar en algunos lugares, pregunta a uno de sus conocidos y le comenta que hable con la chica de la barra, que ella sabe si Mab los puede atender.
No muy lejos del lugar Amarilis logra encontrar a un medico para su guardián, recibe un llamado por el cual le dicen que sus superiores le envían a una persona para que la ayude en su tarea de encontrar el paradero de los Tremeres acusados de insubordinación, luego de las curaciones Amarilis despide al medico y espera ansiosa que venga el que envían, cuando tocan su puerta al abrirla se da cuenta de que es un simple humano, se siente decepcionada, igual lo sigue, el la transporta hacia el lugar, al llegar ella denota que no hay seguridad como antes, así que proceden a ingresar, rápidamente entre la multitud identifica a Clarkus, quien esta charlando con otro cainita, el cual ella presume debe ser un Ventrue por su forma de vestir y actuar.
La situación se torna confusa para Farah, ella solo querría algo de droga para sus "niños" y quedo atrapada en esta pantomima, aunque se siente atraída por lo que se esconde detrás de la cortina rojo carmesí que custodia un simple punk. Víctor no cree prudente acercarse a la barra, observa con ojos desconfiados a los que se acaban de reunir, para el lenguaje de Víctor, esos tipos no son buena compañía.
Amarilis logra entablar contacto con Clarkus y Uriel, este ultimo la recibe como se merece piensa ella, aunque Clarkus la mira como si fuera una cualquiera, eso molesta a la tremeré, Uriel observa que no son los únicos que están en búsqueda de "Reina Mab" se los advierte a los demás y proceden a acercarse al cortinado. El joven punkito los observa sin aires de preocupación, sabe que nadie intenta entrar por la fuerza a molestar a la dama, aun así, el se pondrá firma si quieren pasar.
Víctor se da cuenta de que la maquinaria se pone en marcha y que es hora de actuar, ve a los tres acercándose al cortinado. Clarkus toma la iniciativa y quiere pasar por la fuerza, en punkito se le pone adelante, pero Uriel interfiere en la situación, susúrrale algo mirándolo fijo, el punkito comienza a sentir que la pena inunda toda su mente, comienza a llorar sangre, mientras cada momento se siente cada vez peor. Víctor sabe que es el momento de actuar y se mueve rápido, Farah sigue sus pasos y se adentran, seguidos por Uriel, Clarkus y Amarilis.
La habitación esta iluminada en forma pobre y austera, aun así se puede divisar la mesa con terciopelo y lo más impactante de todo, una señora entrada en años, en muchos años, sentada en un sillón observándolos, se denotan varias siluetas detrás de ella. Si bien todo el grupo entro con ánimos de romper todo, comenzaron a sentirse calmados, extraños, como si estuvieran sedados. La mujer los observa a todos y los invita a pasar, Farah comienza a ver extrañas manifestaciones al rededor de la señora, es como si su aura fuera de todos los colores y se moviera como fuego sobre el agua, extrañas imágenes salen de esto, como caras, se sentía observada.
La dama se presento, Reina Mab dijo llamarse y sabia por que estaban ellos en ese lugar, todos y cada uno de ellos buscaba respuestas, respuestas que quizás se podrían develar, Mab comienza a juguetear con unas cartas que tiene sobre la mesa, los observa y conversa con cada uno de ellos, sabe que tienen miles de preguntas pero aun así, no responde a ninguna de sus preguntas, las cartas comienzan a flotar al compás del movimiento de sus manos, cuando habla parece como si lo hiciera directamente con su mente y como si el mensaje estaría llegando directamente a cada uno de ellos.
Las cartas vuelan en círculos y en diferentes dirección, la energía del lugar parece aumentar a cada segundo, el grupo entero esta atontado, como en un transe, Farah no para de ver las cara que se forman en el aura de Mab, Comienza a darse cuenta que le susurran cosas, la observan y le hablan. Víctor es el primero en tener la "situación", así es como luego la llamaría. Víctor es pequeño y recuerda a sus padres, ve imágenes que nunca vio, a sus padres en protestas callejeras, sus padres unidos protestando, ve hombres con cascos y protectores de cuero, ve bastones y borsegos , ve humo y ve armas, ve lo salvaje del hombre castigando a personas en plena calle, ve a sus padres caer por balas de goma, ve a sus padres siendo a apaleados, ve un camino, ve un desierto, ve sus pistolas, ve a sus pacificadoras, ve un hombre con rostro cruel, endurecido por los milenios, ve la carta del tarot, ve la muerte, escucha la voz de Mab diciendo "no para ti".
Uriel siente que su cuerpo vibra, las emociones no son su fuerte, aun así, se siente embriagado por ellas, recuerdos de su juventud vienen a su mente, el recuerdo de su padre, de su familia, de lo mucho que trabajaba en la compañía familiar, de su logros, del progreso por el cual su padre casi llego a odiarle, logra ver a su tío, o quien el creía que era su tío, un hombre de facciones duras, pero siempre de actitud amable, casi siempre venia a cenar por las noches y nunca comía, un hombre que cuando se presento la oportunidad lo apaño como si fuera su hijo, el hombre que le demostró que en el mundo existen muchas mas cosas de las que el creía, el hombre que se transformo en su sire, también ve el momento que este le contó el como y el por que de como llego a sus manos, que su padre lo vendió, que tan solo fue un objeto, recordó también como encolerizado volvió una noche a su antigua casa y asesino a su padre, con el dolor en su muerto corazón, pero sabia que era lo correcto, creía que así lo era, los recuerdos se volvieron copias viejas de fotos en blanco y negro, entre todo esto una carta apareció ante sus ojos, las monedas de oro que contenían dentro brillaban como nada en el mundo y supo por que, lentamente se fueron tiñendo de la mas roja y pura sangre que jamás vio, sintió a Mab susurrándole, "poder".
Amarilis siente la venganza apoderarse de ella, sus recuerdos son mas confusos, llenos de sentimientos hacia quien la saco de una miserable situación y la elevo a lo máximo del conocimiento, quien hizo posible que ella cumpla su sueño de ser alguien, quien le enseño como ser una gran maga, su sire, su muerte dejo a Amarilis en un estado de abandono y preocupación constante, la culpa de su desaparición es de aquellos tremeres que no se ajustan a las reglas, esos malditos conspiraron y asesinaron a su amada sire, ellos, con fuego destruyeron la gran biblioteca de Transilvania, con su regente dentro, sin posibilidad de escape, sus recuerdos se tiñen cada vez mas de venganza, fuego y venganza, dentro de ese mismo fuego, logra observar una carta, una torre partida en dos por un rayo, siente la voz de Mab susurrándole, "cambios".
Para Farah las cosas fueron muy diferentes que la de los demás, mientras escuchaba a Mab hablar de diferentes cuestiones, también observaba a los demás entrar en un trance particular, aunque parte de su mente estaba cautiva por las caras del aura de Reina Mab, le susurraban todas a la vez, la imploraban que impida que obtenga la figura, que la figura debía ser salvada, que si lograba poner las manos sobre la figura, nadie estaría a salvo, la bruma consume la mente de Farah, sus recuerdos están muy fragmentados, en ocasiones no recuerda quien es, pero ahora todo es claro, su juventud, su padre, su trabajo, todo ahora es claro. Recuerda el perfume que solía usar su padre, el roce de su bigote al saludarla con un beso, lo mucho que la hacia reír, recuerda lo que hizo que quisiera ser enfermera y así poder ayudar, así como su padre lo hacia con la ley de su lado, aunque ella llevara gasas y cuidados y el un
Clarkus esta preso de la fascinación, encantado por lo que ve y por lo que siente, se siente muy bien, aunque de a poco lo invaden recuerdos y susurros extraño, Clarkus no recuerda mucho de su juventud, apenas si recuerda como fue abrazado, aun así, recuerda las lecciones de su sire, recuerda hacer su propio camino, recuerda las enseñanzas que aprendió durante años de lectura de diferentes creencia y culturas, recuerda como su sentido de aventuras y emociones fue haciéndose cada vez mas fuerte conforme el paso de los años. Siente vibrar sus dedos y cada parte de su cuerpo y entre sus recuerdos una simbología nace, la carta le muestra a Clarkus algo que su mente asocia con un recuerdo, una katana clavada en la tierra, el pasto esta seco así como la tierra, de la espada surge sangre, roja y brillante sangre, siente en su mente la voz de Mab, "el camino del guerrero".
Mientras cada uno va despertando de su pequeño trance, Farah comienza con las preguntas, a lo que los demás se suman, consultan por gran cantidad de cosas, pero Farah es quien advierte que algo no anda bien, las caras del aura de Mab están cada vez mas asustadas y comienzan a gritarle que corra. Los gritos llegaron muy deprisa, el sonido del detonar de armas los despertó a todos, rugidos ensordecedores llegaron hasta ellos, Mab les aconsejo que se retiren, un sonido duro y seco los hizo mirar hacia el cortinado que se encontraba a sus espaldas, cuando giraron, Mab ya no estaba, las figuras que se encontraban al rededor, sacaron sendas armas de fuego y se adelantaron, los gritos y las detonaciones se volvieron mas violentas, un rugido los saca de la parálisis sorpresivo, Farah comienza a moverse hacia el fondo de la habitación, Víctor desenfunda sus armas, Uriel sigue la idea de Farah, Amarilis por su parte sigue el mismo que ambos pero su vista sigue clavada en la cortina, Clarkus se pone a la par de Víctor, siente como su cuerpo se pone tenso de a poco, si su organismo funcionara completamente, sabe que ahora estaría rebalsando adrenalina. El cortinado tan solo se movió unos centímetros, pero nadie lo noto, tan solo se limitaron a observar atravesar la habitación un cuerpo, el joven punkito que custodiaba la puerta, paso entre ellos, destrozado y derramando vitae por todo el lugar, Clarkus sabe lo que hizo esto, sabe que no es buena idea quedarse y sabe también que las armas de Víctor poco podrán hacer, se concentra y conjura una placa de acero, antes de que la conjuración este completa, Amarilis logra divisar a un hombre atravesar la cortina, saltando, en el aire, su cuerpo comienza a cambiar, en segundos esta casi completamente transformado en un licántropo.
La barrera de acero que Clarkus conjuro, entre ellos y el resto de la habitación, no soportara demasiado, pero quizás sea lo suficiente para escapar, Víctor grita que corran, Farah los llama desde la oscuridad, salen por una puerta que da a un túnel, oscuro y húmedo, pero aun así corren, cinco cainitas corren por el túnel, como si el mismo dios los persiguiera para darles caza.
El túnel, oscuro y resbaladizo, los conduce hasta una puerta oxidada, fácilmente Víctor se encarga de desmontarla para seguir. La tenue luz del lugar los desconcierta, están en un túnel de subte, casi todos ellos saben que los subtes son dominios exclusivos de los Nosferatu y estos no suelen ser muy permisivos ante la invasión de su territorio. Se agrupan y tratan de decidir que hacer, mientras los disparos se siguen oyendo a lo lejos.
Alguien carraspea a sus espaldas, todos se dan vuelta al unísono, un joven Nosferatu los observa divertido, Uriel se adelanta para conversar con el, pero solo obtiene esquivas respuestas, sin embargo denota algo, el Nosferatu observa a Farah con gran interés y a su vez Farah hace lo mismo con el. Farah tiene varios motivos para verlo con interés, soñó varias veces con uno de su clan, conoció a uno de estos en un bar, parece que esta clase de cainitas tiene mucho que ver en todo el embrollo en el que esta metida.
El Nosferatu deja de prestar atención a Uriel, las palabras de este se funden en la oscuridad y da varios pasos para llegar a Farah, la mira con solemnidad, casi con adoración, le pregunta si se conocen y cuando la respuesta es negativa casi parece que se quita un peso de encima, los observa a todos, divertido, casi extasiado y les pide que lo acompañen, hay una salida muy cerca y espera que todos puedan salir ilesos del lugar.
Los disparos se incrementan, los gruñidos severos y guturales también, el grupo corre por los túneles, liderados por un Nosferatu, los túneles se transforman en cuevas y en túneles otra vez, les es imposible recordarlo todo y cuando comienzan a aburrirse de correr tanto, el joven Nosferatu les indica que la salida esta a solo 2 cuadras delante de ellos.
El llegar fue fácil piensa con jubilo Uriel, quien lo que mas desea esa noche es salir de ese apestoso lugar, pero el problema parece ser salir, lo que encuentran delante de ellos es una excavación de mantenimiento, pueden ver el cielo nocturno, pero el agujero que tienen es lo suficiente mente grande como para un edificio, aun así, buscan las salida con frenético ahínco. Luego de severos minutos perdidos, se dan cuenta que trepando por los andamios es posible llegar a la superficie, esto les demora otros minutos valiosos, pero lo logran, cuando salen a la luz de la ciudad se quedan pasmados al ver la estructura, una iglesia antigua se encuentra ante sus ojos, esplendorosa magnificencia de la arquitectura antigua, les pone a pensar que no es casualidad que se encuentren en ese lugar.
La fantástica iglesia se encuentra con reparaciones, los andamios rodean un ala de dicho lugar así como muchos de los vidrios de los pisos superiores están cubiertos de papel. Víctor cree que lo mejor seria entrar a resguardarse de sus perseguidores, los demás asienten y van en busca de una forma de entrar, cuando Clarkus observa con detenimiento, ve ciertos indicios que hacen suponer que esta iglesia perteneció al clan de los Tremeré.
Inspeccionando los laterales de la iglesia descubren que el lugar tiene muy pocas formas de entrar, pero se encuentran frente a una de ellas; una ventana que da hacia el interior, parece tapada por papel madera, Clarkus, enojado por la demora que están teniendo, ordena a Víctor que haga su trabajo y rompa esa ventana, abduce que los simios como el sirven para esas cosas, lo siguiente que Clarkus observa es el vidrio astillado en su cara y descubre que lo que creían papel madera no era mas que el fondo de un ropero. Clarkus gira sobre si, pero ya tiene los ojos de Víctor en sus ojos, la intimidación da sus frutos pero alguien más interviene, Uriel trata de tranquilizar la situación convenciéndolos que lo mas entupido que pueden hacer, es paliarse entre ellos.
Clarkus se disculpa con Víctor y ambos se ponen a trabajar, Farah comienza a impacientarse luego de que movieran el ropero de lugar, ya que nadie quería ingresar primero, toma la iniciativa de dicha situación e ingresa a la parte central de la iglesia, la penumbra cubre todo el lugar, llena cada recodo y los deja tan solo con los pequeños destellos de luz de la ciudad y de la escurridiza luna que apenas asoma su rostro esa noche.
Dentro de la sala principal de la iglesia hay poco bancos y en donde se supone que estaría el cristo y su cruz, no hay nada. Esto llama la atención de Uriel, se ven sendas escaleras hacia el primer piso, suben en forma espaciada y con suma cautela.
El piso superior de la iglesia esta lleno de telas y polvo de construcción, el piso es de madera y los Vitro de las ventanas dan un aire peculiar al lugar. Clarkus comienza a revisar algunas cajas y pequeños escritorios que se encuentran en dicho piso, que al parecer en otra época funcionaba como biblioteca, todos comienzan en frenética búsqueda de pistas o documentos, sobre todo, aquellos que observan sendas simbologías Tremeré entre algunos Vitro. Clarkus da con un libro en un cajón cerrado con llave, un libro que aparentemente contiene indicaciones que no llega a comprender del todo.
Amarilis y Uriel se adentran en uno de los pequeños cuartos de este piso, observan lo derruida que esta la habitación y la luz que apenas tiene no les sirve mucho para rebuscar, lo cual seria propicio ya que pueden observar sendas pilas de libros por doquier, amarilis comienza a rebuscar entre sus ropas para poder hacer luz con algo, lo cual se lo comunica a Uriel, si es que este tiene un celular encima para alumbrar algo, este la observa asombrado por dicho comentario, y procede con su brazo izquierdo a accionar el interruptor de la luz. Amarilis ni presta atención a su sutil forma de dejarla en ridículo y se abalanza contra los libros, desea encontrar algo, lo que sea, Uriel se aproxima a una pila de libros y se pone a revolver, no es que en su vida fue el amante de literatura mas encarnizado, pero tampoco tubo demasiado tiempo para disfrutar de un buen libro, así que su visión de que están buscando es minima.
Farah es la primera en oírlo y se lo comenta a Clarkus, gruñidos afuera de la iglesia, este agudiza su oído y también puede oírlo, fuertes gruñidos vienen de fuera y el espera que no ingresen, pues estarán en problemas.
